El Mastín es uno de los gigantes entre los perros. Raza grande, fuerte, y propiamente criado formidable con la familia. Aunque también, en tiempos ya remotos, no tuvo rival en la guerra, o como cazador de animales grandes.

Se estima que los antepasados del Mastín ya existían en el Medio Oriente hace unos cuatro mil años. Más tarde los fenicios lo introdujeron en Europa. Ya se encontraba presente en Inglaterra durante la ocupación del Imperio Romano en estas islas. Se le agregó algo del San Bernardo en el siglo XIX. Durante la Segunda Guerra Mundial estuvo muy cerca de desaparecer del todo. En el presente es una de las razas más deseada por los criadores y como mascota.

El Bullmastín es un perro grande, de mucha resistencia. Se le empleó como perro de pelea y para morder a los toros. También fue usado para cuidar en las grandes fincas donde los bandidos cazaban sin permiso de los propietarios.

Esta raza se logró en el Reino Unido no hace mucho, en el siglo XIX, lo cual en la familia de los Mastines es relativamente joven. Básicamente es el cruce del Mastín con el Bulldog. Siendo el propósito del cruce lograr un perro rápido que pudiera atrapar a los ladrones y detenerlos, sin hacerles daño, hasta que llegara la policía o los empleados de la finca. A principios del siglo XX se estabilizó la raza y se admitió en las federaciones caninas.

El Mastín Napolitano es un perro grande. Se le usó como perro guardián, perro de pelea y se llevó a las guerras como perro para atacar al enemigo. Gran perro de protección y ha sido empleado como perro policía. Aun es posible verlo en ciertos lugares con las orejas cortadas, preparado para efectuar tareas físicas.

Esta raza tiene más de 2000 años de existencia. Se dice que esta raza desciende del cruce de una pareja de perros que le fue regalada a Alejandro Magno en el norte de la India con otros perros de Asiria y Persia.

El Mastín Tibetano es un perro de buen tamaño. En su tierra natal fue el guardián de los monasterios, rebaños de animales, las villas y campamentos.

Esta raza tiene sus orígenes en Asia central, en el Tibet. Se estima que de esta raza hayan surgido las otras ezas de mastines que existen en el presente.